
“Estos hombres marchan sobre nuestras huellas y si esperamos que quieran desengañarse, nos volveremos sus siervos y sus victimas, nuestras mujeres sus prostitutas y nuestras bienes su botín. Cuando hablamos de fraternidad olvidamos que aquellos de enfrente son mendigos y vengativos, feos, malsanos, viciosos, crueles y despóticos, mas malévolos que los peores entre nosotros y mas mentirosos que nuestros mas decididos sofistas.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario