martes, 8 de septiembre de 2009

Hoy tengo ganas de decir algo sencillo.

Escúchame bien, destápate los odios, desentume tu desgastado cerebro. Abre los ojos y mírame directo a los ojos. Te has dicho el creador de todo lo que hay en el universo, de la vida misma y de la muerte. Eres un malito cobarde. Sádico desde tus pies hasta tus grandes alas y tu todopoderosos espíritu omnipresente. Te deleitas mientras el depredador rompe los huesos a su presa. Mientras el desvalido lucha por sobrevivir día a día, así es tu mundo de depredación. Déjame decirte que no me gusta tu jueguito y no voy a seguirlo. Tomare la hostia con la mano derecha y con la izquierda mi verga dura que reventara hasta manchar tu santa presencia, santo pedazo de mierda, Dios todo poderoso, maricon de maricones, tirano que su infamia no se compara ni con la de aquel duende verdugo chino de nombre Mao y que prometió, al igual que tu, inmundo lleno de esperanzas..

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